miércoles, 12 de noviembre de 2014

La ola pedófila que se convierte en Tsunami


Desde hace 15 años que la homosexualidad entre mayores de edad fue dotada de facultades y hoy más del 60% de la población nacional cree que los adultos homosexuales tienen derecho a ejercer su tendencia sexual sin restricciones de ningún tipo. 
México es uno de los países que más libertades legales y sociales ha dado al movimiento Lésbico-Gay.
Los términos "libertad de género" o "diversidad sexual" son comunes y aceptados sobre todo por las nuevas generaciones que han crecido bajo una notable influencia de estas reformas culturales impulsadas a nivel mundial.
Una vez aceptado esto, otros grupos han levantado la voz pidiendo también su espacio y hay un grupo en particular que parece estar viviendo uno de sus mejores momentos gracias a la familiaridad de las sociedades con el concepto de diversidad sexual.

El movimiento activista pedófilo es uno de ellos y desde 1989 ha venido logrando diversos alcances de la mano de defensores del movimiento LBG que han logrado crear una agenda la cual lenta y gradualmente han ido alcanzando en los últimos 20 años.

Al inicio era legalizar el derecho de las parejas del mismo sexo a ejercer sin imputación jurídica su tendencia. Alcanzado.

Posteriormente se fijaron la meta de conseguir la plena difusión de la cultura LBG con apoyo legal y social. Conseguido.

Más adelante, se fijaron la meta de conseguir el derecho a la adopción de niños. En progreso con un 60% de avance a nivel mundial.

Luego, se fijaron la meta de extender la regulación jurídica de los derechos LBG a los niños bajo la forma de "derechos reproductivos" o "educación sexual libre". En progreso con un 80% de avance a nivel mundial.

Campañas de descrédito hacia sus detractores (principalmente grupos cristianos y organizaciones de apoyo a la familia) son aceptadas y soportadas en aras de la libertad sexual y la modernidad.
Desde hace 3 años en especial, comenzó una nueva línea de la agenda cuya batuta la encabeza precisamente el Movimiento Activo Pedófilo.

La meta: Despenalizar la pedofilia en un término jurídico así como desasociarla del catálogo de enfermedades mentales para que deje de ser considerada una parafilia y llamada también "una tendencia sexual más".

Al menos 5 países desarrollados han emitido ya leyes despenalizadoras contra casos de pedofilia. 
Es decir, los adultos sorprendidos teniendo relaciones sexuales o contactos físicos con menores de edad no son más vistos como delincuentes sino como personas que indujeron un acto sexual sin consentimiento pleno de sus "parejas" o víctimas.

Marruecos fue punta de flecha en años pasados cuando su Presidente exoneró a un pedófilo argumentando que su tendencia no era delito sino inclinación sexual.
Este movimiento en verdad cree que el "amor" (forma disfrazada de decir atracción sexual) de un adulto a un niño es tan válido como entre adultos.

Al igual que el movimiento LBG se ha rodeado de psiquiatras, psicólogos, abogados y organizaciones sociales en apoyo de su causa.

De las preferencias sexuales entre adultos con adultos no tengo comentarios salvo que cada adulto sabe perfectamente lo que hace.
La homosexualidad activa (como la heterosexualidad) tiene sus propios riesgos y consecuencias en todos los planos.

Lo que no puedo evitar notar es el empuje que la Pedofilia está haciendo ahora para llegar a los niños. Los niños son el objetivo principal de esta derivación de la agenda.
Caricaturas, reportajes, películas y campañas escolares así como renovaciones legislativas están sensibilizando a las sociedades para aceptar el derecho sexual de los adultos para con menores de edad.

Hoy hay una cantidad notable de material editorial enseñando a pedófilos que su inclinación no es un delito ni tampoco es un crimen.

En aras del "amor" los pedófilos son adoctrinados a persistir en sus actos justificando su derecho de "amar" y expresar su sexualidad aún si su target son niños.
Bajo la forma "chistosa" o "cómica" de símbolos y textos, el movimiento pedófilo está conquistando terreno frente a todos los que ven como "gracioso" y "normal" una serie de TV, un película, un vídeo musical, una caricatura que muestra a niños siendo testigos de besos o relaciones sexuales entre adultos. Lo que parece una genuina defensa del derecho homosexual, está siendo sin embargo el preámbulo a una sensibilización sobre la niñez y las actividades sexuales de los adultos.












De manera más frecuente (gracias a las nuevas aprobaciones legislativas en materia sexual) no solo se hipersexualiza a los niños sino además se comienza a preparar el terreno para que un niño pueda (en aras de su libertad sexual) aceptar una relación sentimental y/o sexual con una persona cuya edad lo supere.

Así, la aceptación de la pedofilia se está conquistando desde dos frentes:
A los niños se les está condicionando a recibir la homosexualidad como normal para que a su vez, ellos puedan reclamar sus propios derechos sexuales sin la intervención de sus padres o tutores y que los Estados podrán respaldar legalmente.

Acto seguido, un niño (una vez convencido y persuadido) puede apelar a su derecho legal de ejercer su propia sexualidad incluso con un adulto (esté o no, emocional, física y sexualmente listo para ello).
Del otro lado, los adultos pedófilos podrán ejercer también su libre derecho a ejercer sus propias tendencias sexuales (con apego a la Ley) para con niños pues jurídica y culturalmente esto podría ser tan aceptado y legalizado como los derechos LBG.
Si acaso cree que estoy exagerando baste ver la evolución de la legislación en materia de derechos sexuales de los últimos 5 años enfocados principalmente hacia los menores de edad y donde se le están dando a los Gobiernos potestades plenas sobre los hijos 
incluso encima de los propios padres o tutores. México no está siendo la excepción.

El aumento de casos de pedofilia en la religión popular han abierto una nueva discusión que lentamente pretende incluso justificar bíblicamente la pedofilia en aras del "amor" y la aceptación divina de todos sus hijos sin importar su diferencias (pasando de largo el tema del pecado y la maldad moral).
El movimiento activo pedófilo ha aumentado el número de publicaciones que enseñan que el "amor" (sexual desde luego) hacia los niños debe ser legalizado, normalizado y no penalizado.
Tan es así, que han elaborado un documento que circula ya como pan caliente en Internet de nombre "Guía del Amor Infantil" que es en realidad un manual que enseña cómo ser un pedófilo, justificando primeramente sus pensamientos, sentimientos y actos, para luego brindarle una serie de "técnicas" que le permitan ganarse la confianza de niños a los cuales pueda "enamorar" y finalmente convencer de llegar a actos sexuales a niños los cuales desde luego, harán todo ello bajo ENGAÑOS e incluso contra su plena voluntad.
El manual enseña cómo evitar ser descubierto por otros adultos, como engañar a los niños para confundirlos con conceptos de juego-amor-sexo y ganarse su confianza.
Un compendio criminal disfrazado de método científico y justificación psicológica que complete a los hombres y mujeres pedófilos a ejercer libre y sin culpa su abierto delito.


Más del 70% de desapariciones en México tienen como objetivo a menores de edad. El aumento de pedofilia, pederastia y trata sexual han tenido un crecimiento paralelo poco documentado en los medios informativos por temor a ser tachados de homofóbicos o obsoletos en materia de derechos sexuales modernos. La realidad sin embargo es que detrás de cámaras y por debajo de la opinión pública nuestros niños y niñas son el abierto objetivo de una agenda sexual planeada desde los años 60 y que con mucha paciencia y constancia está viendo resultados.

Cada vez más personas portan orgullosas en cadenas, pulseras, playeras y en programas para niños símbolos de este movimiento pedófilo activo.
Quienes pensaron y piensan que el movimiento LBG tendría como límite solo los derechos sexuales de los adultos como personas plenamente facultadas a decidir de sus propios actos se han equivocado y siguen apoyando una agenda que no tiene pena ni reparo en ir sobre los niños.


Esas lindas personitas que, por su propia naturaleza e inocencia, son altamente moldeables e influenciables y altamente reactivos a los estímulos (positivos o negativos) que se les provea.
Desde luego, los derechos humanos inherentes a todas las personas en el mundo establecen que ninguna persona puede ser forzada a ejercer bajo engaños, coerción o fuerza física a tener relaciones sexuales sin su pleno consentimiento.

Los niños NO tienen porque ser sexualizados. Los niños NO tienen porque se empujados a tener relaciones sexuales (para las que no están preparados desde ninguna perspectiva) en aras de los "derechos" sexuales de ciertos adultos que solo buscan satisfacer sus propios egos y deseos con una terrible falta de control sobre sus propias mentes y cuerpos negando que necesitan apoyo psicológico, emocional y espiritual.

Oremos que nuestros hijos e hijas y los niños de las próximas generaciones sean guardados de la enorme ola de maldad disfrazada de modernidad que cada vez es más social y culturalmente aceptada por casi todos los sectores. Esto no tiene nada que ver con religiones. Es mera humanidad. DEJEMOS A LOS NIÑOS SER NIÑOS.

Sitios de denuncia de delitos sexuales:




2 comentarios:

Bibiana dijo...

Muchas gracias por tu post es clarificador, por favor sigue escribiendo. Es cierto esto no tiene que ver con religión es humanidad y sentido común.

Unknown dijo...

Isso aqui que pefeirto viu